La contribución del aficionado al éxito de un juego es indiscutible y en nuestro caso, a los Cliffhanger me refiero, otorga doble cantidad de Puntos de Experiencia a quien se atreve con el reto, porque en seguida sale quien le dice aquello de: ¡Eh, tú eres de Ludotecnia...!, así en plan ¡ladrón, qué calladito lo tenías!
Bueno, ante estos casos siempre queda el recurso de negar la mayor como hizo San Pedro por tres veces consecutivas, cuando le señalaron horas despúes de los tristes sucesos ocurridos en el monte de los Olivos, aunque lo normal suele ser dejar de plantear ideas en público para nuestros juegos por evitar que «la comunidad» cierre sus puertas a quien haya quebrantado «la regla», considerándolo poco menos que un contaminado cualquiera.
De manera que sí, en esta santa casa valoramos como a auténticos héroes y heroínas a todos aquellos que sabiendo a lo que se exponen, tiran «p'alante» con dos cogieron o dos ovarios, que en esto no hacemos distingos.
Y hoy nos vamos a hacer eco de una de estas grandes gestas que a pesar de los pesares ocurren, que aunque data de finales del año pasado consideramos que sigue resultando muy interesante para los aficionados a Mininos en la Sombra, por cuanto puede abastece de material fungible a nuestro Cliffhanger número 4, ofreciendo además, un inteligente giro de tuerca al trasfondo propuesto por Abelardo Martínez en su juego.
Se trata de una aventura de 18 páginas diseñada, escrita y maquetada por Jose Manuel Real, que podemos encontrar bajo el título «Asesinado por Cuervos» en Bastión Rolero.
No pudimos hacernos eco cuando debíamos, lo reconocemos, pero para enmendar este tipo de cosas siempre hay tiempo. Así que siguiendo el enlace de abajo, puede ser toda vuestra.
Nos leemos.
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