Ludotecnia os desea unas felices fiestas lejos de credos y confesiones, o cerca de ellos y ellas si os apetece. Y a los que cenáis acompañados de la familia política... en fin, mucha paciencia con los cuñados y etcétera, o en su caso, recurrir a una tirada de Carisma en Fácil (con un enorme bonificador por gentileza del Árbitro de Juego) para salvar el escollo.

Por último, si os tenéis que trasladar: id y volved enteros, que la página que se ha abierto en la historia de los Juegos de Rol en España merece que la leamos todos.

¡Feliz Nochebuena a todos!

[...] La aviación como disciplina apenas tenía diez años de vida cuando estalló la Gran Guerra y, aunque todavía no tenía un papel netamente definido dentro del organigrama militar, para la gente de a pie surcar los cielos a bordo de aquellas maravillosas máquinas voladoras era una tentación difícil de contener. Aun así, las pruebas de selección eran duras y sólo los candidatos más aptos serían admitidos para formar parte de la elite de los pilotos de combate. Algunos de estos nuevos pilotos pertenecían ya a unidades de infantería, caballería e incluso marina, pues se buscaban hombres valientes, sin miedo a la muerte y con firmes convicciones. Muchos de ellos serían militares jóvenes y brillantes que vieron en el cielo la oportunidad perfecta para impulsar sus carreras.

En comparación con el resto de las fuerza armadas, en las que se había perdido hacía tiempo el sentido del honor que suponía el combate cuerpo a cuerpo y el desafío singular entre hombres, en el cielo todavía quedaba lugar para celebrar duelos a muerte entre caballeros. 

[...] Además de ser un punto clave de la vida social cada domingo, entre semana la iglesia es también un espacio que utilizan los zagales pa’jugar o, en general, pa’mantenerse lejos de los ojos de los mayores.

Junto al viejo edificio debería estar la casa del cura. 

Ya no hay cura en el pueblo (hablaremos de ello más alante) de modo que ahora puede estar abandonada (otro lugar de recreo pa’los zagales), o puede haber sido comprada y reconstruida por un veraneante o por el rico del pueblo.

1863, cualquier lugar desenfocado de los muelles de New York...

Sr. Juliett Tango: ¿El mundo es un lugar tan malo?

Sr. Juliett Mike: Podría ser mejor...

JT: ¿Has aprendido más psicología en la editorial que en la facultad, o has necesitado todo lo que aprendías en ella para sobrevivir entre nosotros? En todo caso, ¿por qué has tardado tanto en terminar la carrera?

La galería número 5 ha cedido pero nos quedan cuatro más... 

El paso de las horas se nos está haciendo eterno pero tenemos el ánimo firme. Esta noche, tal vez la de mañana... No hay luna llena y el tuerto que hace la ronda ya ha malgastado todas sus miradas agoreras... El gallinero rebosa fortaleza y decisión porque ya no hay vuelta atrás, y aunque alguna de nosotras acabe en la cazuela, servirá gustosa de almuezo con una sonrisa bien puesta porque todo esto ha merecido la pena y porque estos momentos hay que vivirlos para saber lo que valen...

¡Co-co-có, co-co-có! La galería 5 ha cedido, pero nos quedan cuatro rutas más para salir campo a través a comernos el mundo...

Fruto del acuerdo entre las multinacionales Tiro al Friki y Ludotecnia, el primer libro de la línea Cliffhanger, ¡Gañanes!, será entregado al ganador del 1º Concurso de Tiro al Friki.

Y os preguntaréis: ¿qué concurso es éste que aparece cuando han surgido otros muchos como setas en otoño, y que para colmo ofrece un libraco de 3,50 Euros como premio...?

Entendemos que a veces es complicado enterarse de las noticias y las cosas de una editorial chiquitina como la nuestra en un entorno tan abierto y vivo como es Internet, pero nosotros no cejamos en nuestro empeño de manteneros informados, y por intentarlo no será.

En nuestro recorrido por las mejores radios del planeta, este lunes toca la entrevista que nos hizo Delfos en su Tiro al Friki, que podréis escuchar el a partir del lunes las 15:00 horas  en su emisión por Internet desde Radio San Andreu (absténganse Mac-adictos) o bajando el correspondiente episodio del podcast en Nexo de Caminos.

Puede parecer incomprensible, pero nuestro mundillo sigue sumergido bajo toneladas de caspa. Cuando no se buscan alineamientos de dudoso entendimiento en un país que protege en su Carta Magna las libertades de opinión y expresión, sale una venus atrapamoscas que afirma que quiere hablar de otras cosas para encelarse a renglón seguido con un tipo que no le gusta, dice, pero al que envidia...

Cuando se desvela que Ragnarok sigue estando en otras manos, las mismas en las que lleva varios años, nadie de los que nos acusaron de pretender sacar tajada de cuanto pardillo encontrábamos a nuestro paso ha tenido redaños para admitir que había metido la pata hasta el zancarrón. Y mientras, la élite de la intelectualidad en la que se mira más de la mitad del minorismo patrio, descansa en su limbo particular y silencioso sin señalar con el dedo a nadie que no sea señalable, criticable, decuartizable...

Que nadie se llame a engaño. Cliffhanger es pequeñito pero matón. Es como un niño con la cabeza gorda, como decía un autor de esta casa hace unos días. Algunos podrían pensar que, porque los títulos de esta serie vayan a salir con un número limitado de páginas, van a ser una especie de producto menor o residual de una cadena de montaje imaginativa como es Ludotecnia.

Vaya error. Incluso vaya error el que yo mismo cometí cuando alegremente acepté colaborar en esta línea. Creo que deberíamos empezar separando tamaño de formato ¿verdad? No, no es lo mismo. Cliffhanger es un formato pequeño, pero no es un tamaño pequeño. Quiero decir que en Ludotecnia nos hemos empeñado en meter ideas grandes en frascos pequeños, algo así como si quisiéramos meter genios en lámparas esperando a que alguien las acaricie y sepa devolverlos al aire libre para poderles pedir todos los deseos que sean capaces de cumplir.

Siguen sucediéndose en el mundillo los hechos significativos, para descuaderne de aquellos que no hace tanto alzaban la voz anunciando el apocalipsis rolero y el fin de todos los tiempos.

A la espera de que WekeLeaks haga públicas las conversaciones secretas que ha mantenido Ludotecnia con las licenciatarias de sus juegos, o desvele la razón del silencio de estos últimos años, o aún de las ojeras del Sr. Juliett Tango, aprovechamos la ocasión para anunciar que desde hace unos días, Jorge del Moral y su gente ya tienen dispuesto un lugar desde donde trabar contacto con los aficionados a Ragnarok.

Vaux sur Somme. Francia (21 de abril de 1918).

El soldado australiano Snowy Evans arrojó otra reluciente bala al cubo que tenía enfrente. Sentado en aquella hedionda trinchera del norte de Francia añoraba profundamente los verdes pastos de su Queensland natal.

Apenas habían pasado cuatro años desde que partiera hacia Galípoli desde el puerto de Sídney a bordo de un abarrotado navío de guerra y, sin embargo, le parecía que hubieran pasado décadas. A pesar de que la travesía fue dura, nada le había preparado para las atrocidades y desgracias que sufrirían él y sus compañeros de caballería en territorio turco. Ningún instructor les había hablado de las mutilaciones, de la confusión de la batalla, ni de la tortura que suponía para el alma presenciar y sufrir semejantes vicisitudes.

En una galaxia muy, muy lejana…

Sr. Juliett Tango: He reconocido, aunque no suficientes veces, que fuiste una de las dos personas que me ayudaron a mantenerme en pie durante los duros años 1999 y 2000. Si no te lo había agradecido en público creo que ha llegado el momento de hacerlo, así como mostrarte mi infinito aprecio porque me hayas permitido disfrutar de tus críos y de tu media naranja, de tus horas altas y bajas, de tus alegrías y también de tus tristezas... ¿Estabas tan perdido como yo en aquella época amarga, o pensabas que Ludotecnia hacía de Rebelión en esta película y que a mí me hacía falta una patada en el culo para que se me quitara la resaca de encima?

Cualquier diccionario te dirá que una ciudad es un  «conjunto de edificios y calles, regidos por un ayuntamiento, cuya población densa y numerosa se dedica por lo común a actividades no agrícolas...» ¡Mentira! 

Una ciudad es infinitamente más que eso. Una ciudad es la plasmación sólida de la conciencia colectiva, su estrés, sus pasiones y vicios, su caos inherente y la única ley que entiende el ser humano sin sacar el pecho de la dignidad que sólo él mismo cree tener: la del más fuerte. No he mencionado en la receta el término virtudes, y no pienso hacerlo, porque las virtudes son como el rocío en medio de un incendio: poético, pero inútil. En definitiva, una ciudad es un ser vivo, una costra arraigada en la tierra, decidida a consumirlo todo de raíz a medida que crece y crece en su gula autocomplaciente y dibuja nubes artificiales para asegurarse que ni el aire escapa de su brutal dominio. Si aún no eres asmático, créeme, alguno de tus descendientes lo será, y pronto.

Sabido es que Ludotecnia es un poder en la sombra, cuya sombra (valga la redundancia) que se proyecta en todos los ámbitos, menos el financiero, por supuesto, no vaya a ser que ahora tengamos la culpa de la crisis, que bastante tenemos con ser la eterna editorial fantasma o resucitada, y la perenne responsable de lo que ocurre con los juegos cedidos que hemos cedido a terceros.

Como toda influencia fáctica que se precie estamos rodeados de serviles poderes afines y concomitantes, así como del favor de varios ministerios de otros tantos Gobiernos, y de ONG's, holdings empresariales y medios de comunicación e intoxicación... Entre estos últimos se cuentan reconocidos blogs del mundillo que se postran ante en Sr. Juliett Tango para que ejerza de emperador en las sombras de este mundo, del sistema solar y de parte de la galaxia...

Con el fin de ir acercando el interior de Ludotecnia a los ludotecnópatas, secuaces, gente afín y enemistades en general, vamos a dar comienzo a una serie de entrevistas que comenzarán este próximo sábado y que se prolongarán hasta que Dios quiera, porque ludotecnócratas tenemos a puñados.

El encargado de elaborar los contenidos y llevarlas a cabo será ¿cómo no?, nuestro queridísimo y nunca suficientemente valorado Sr. Juliett Tango, quien además de saber con pelos y señales de qué pie cojea cada uno de los integrantes de la casa, no tiene pelos en la lengua ni en el teclado, lo que augura felices y entretenidos enfrentamientos, porque la cosa no irá de establecer un perfil de preguntas homogéneo y que la peña conteste, sino de pulsar el alma del entrevistado con una batería de interrogantes que logren materializarlo ante los aficionados.