Ha sido estar en la capital y ver la luz. El aficionado no quiere autocomplacencia sino músculo, mucho músculo, y cifras y datos y fechas. Esto de andar compartiendo material no mola aunque sea gratuito...
Lo malo es que lo tenemos jodido para cambiar tan radicalmente, así que hemos decidido ir haciéndolo poco a poco, para que no se note, de manera que entre pitos y flautas a nosotros nos vaya dando tiempo para ir terminando nuestras cosillas y a la distribuidora para ir vendiéndolas, que no es por nada, pero el mercado parece que tiene un fuerte catarro.
¡Hala, queda desterrada la autocomplacencia!