21-feb-2005 / Sin título [Fallujah, 2003]

Nuestros chicos vieron y escucharon algo que les hizo reaccionar. Es cierto que no se pudieron hallar evidencias que demostraran que aquello no supuso una masacre premeditada, pero sigo creyendo que nuestros chicos se limitaron a repeler el «ataque» que parecían estar sufriendo.

Lo de menos fue que los periodistas nos metieran el dedo en el culo, o que los de HRW [Human Rights Watch] nos pusieran a parir en sus informes afirmando que aquello había sido totalmente deliberado. Lo importante es que a resultas del suceso se decidió que interviniéramos nosotros, y ¿por qué íbamos a intervenir nosotros si no había una causa que lo justificase?

Me permitieron entrevistarme con ocho chavales. Todos ellos decían haber visto y escuchado lo mismo: estaban siendo atacados y recibieron orden de contestar, así de sencillo.

Los oficiales y Nantz [82ª División. Teniente Coronel. Eric Nantz], con quienes también pude charlar, corroboraron punto por punto lo dicho por sus hombres. No había rastro de balazos en la escuela. Ninguna víctima llevaba armas. ¿Era suicida un ataque a tan corta distancia, era estúpido ampararse entre la multitud, fue criminal…?

Ver y escuchar son experiencias estrictamente personales, y precisamente por eso, bajo determinados supuestos, resultan muy objetivas.


21-feb-2005 / Sin título [Fallujah, 2003]

Creo que la clave de lo que está sucediendo está en los factores desencadenantes de lo que pasó allí [Fallujah]. Si no hemos hallado nada después del esfuerzo y la pasta invertida para detectar algún cabrón con identidad suficiente [Sujeto portador Alfa] en el otro bando, muy bien el cabrón podría haber estado en nuestro lado, porque de no ser así, es mucho más potente de lo que imaginábamos y tendremos un serio problema si no lo encontramos pronto.


09-ago-2005 / Bajo pabellón negro [Sin interés]

Fui destinado a Iraq mucho antes de que comenzase todo esto. Entré a través del kurdistán turco, bajo bandera de Reuters. Esto ocurrió antes de que el gran hechicero [Paul Bremer] hiciera acto de presencia, y lo menciono porque con él llegaron también los lobos de Washington.

Fue una época espléndida. Conocí a Harald [Dietrich W. Forgue. Corresponsal UPI]. Iraq estaba en guerra con Irán y nosotros jugábamos en los dos tejados. En el 89 me retiraron a Jerusalén, después abandoné el servicio y me instale´ como civil [SIMS], ejerciendo de analista.

No fue fácil, aunque no me arrepiento. Mi formación [UCLA, 1973], el tiempo que hice de corresponsal [CIA, 1974-1989] y mis contactos, me iban a aportar una experiencia que iba a resultar crucial en mi nuevo desempeño. El dinero es miedoso, y no juega si no hay seguridad. Ahí entraba yo.

Bajo pabellón negro

Publicado el

martes, 12 de junio de 2012

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4 Comments
Héctor Prieto dijo...

Curioso. ¿De qué irá esto?

Omar El Kashef dijo...

A mí me huele a Mutantes por todos lados...

Héctor Prieto dijo...

Pues hoy me he duchado, así que no creo que sea yo.

Omar El Kashef dijo...

Joe, pues me quedo sin sospechosos... la hostia...