El día ha pasado tranquilo, aunque hay dos que yo me sé, que se lo han zampado entre correos electrónicos y llamadas telefónicas, ya que habíamos prometido unos jurados de bigotes para nuestro Concurso Cazatalentos, edición 2012, y aunque estamos a punto de conseguirlo, lo cierto es que recabar gente del calibre de directores de arte, editores, talentosos de todo pelo y condición, ilustradores de postín, etcétera, se las trae con abalorios y resulta cuando menos bastante laborioso, entre otras cosas porque hay que tirar de contactos y apalabrar alguna que otra cerveza o vino.

Y es que la calidad de los concursos la ponen sobre todo los concursantes, por un lado, el más obvio, y por otro, la gente que va a medir su talento, los que componen el jurado, en este caso los jurados (para relatos, para juegos y para ilustraciones y portadas), y aquí la verdad es que queríamos sorprenderos.

Si los concursantes ya han puesto su granito de arena, a estas horas podemos decir que tenemos cubierta la media docena de hombres sin piedad a la que aspirábamos. Quedan unos cuantos más hasta completar el cupo, pero para este próximo fin de semana seguro que hemos cumplido el objetivo de amarrarlos a todos.

Nos leemos.